CETSUR lanzó su plan de gestión 2019 y lo enmarcó en un intercambio de semillas y plantas que reafirma su compromiso con el arte agrícola.

En marzo la ONG CETSUR lanzó su plan de gestión para el presente año, en el cual destaca el trabajo conjunto con el Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, que tiene por objetivo fortalecer y recuperar las “agroculturas”, es decir, revalorar las prácticas de distintos grupos rurales y urbanos que organizan su vida en función del cultivo.

La campaña “AgroCulturas para el Buen Vivir” es financiada por el Programa Otras Instituciones Colaboradoras (OIC) y ha permitido afirmar el liderazgo de la institución en el proceso de resguardo y valorización del patrimonio cultural inmaterial de las comunidades indígenas, campesinas y urbanas de distintas localidades del sur de Chile. Reflejo de esto fue el lanzamiento del plan de gestión de la ONG, donde 10 agrupaciones vinculadas al arte del cultivo alimentario del Gran Concepción se reunieron para intercambiar plantas y semillas y, donde se presentó la muestra fotográfica “Vamos al grano, hablemos de trigo”, dando cuenta del oficio de las curadoras de semillas.

Para Paula Mariángel, presidenta de CETSUR, “lo valioso del intercambio es que da vida a la relación y al vínculo directo entre personas que vienen de distintos puntos geográficos de la provincia de Concepción, y que sin embargo, tienen una ocupación en común, el arte agrícola”. También, Eris Coronoda, curadora de semillas de la Araucanía, insistió en lo relevante de continuar traspasando los saberes a las nuevas generaciones, ya que para ella “es importante [encontrar] personas que cultivan un huerto y que se reúnen por una causa en común, que son las semillas”.