La Estación Costera de Investigaciones Marinas de la Pontificia Universidad Católica de Chile, ubicada en el balneario de Las Cruces, comuna de El Tabo, fue el escenario de la reunión de 54 jóvenes provenientes de 11 países de América Latina y el Caribe, quienes acudieron para conocer los impactos negativos que los humanos causan en la naturaleza.
La visita enmarcada en el encuentro internacional Generación Concausa, iniciativa que invita a participar a adolescentres entre 15 y 17 años para proponer actividades de innovación y superación de la pobreza infantil, tuvo por objetivo conocer los distintos espacios de interacción entre el humano y la naturaleza y con ello, añadir en sus proyectos una arista de desarrollo sostenible que potencie la Agenda 2030 de las Naciones Unidas.
Los encargados de recibir a los 54 seleccionados fueron los científicos del Núcleo Milenio Centro de Conservación Marina, a través de su programa de educación “Chile es Mar”, quienes realizaron charlas y actividades pedagógicas para que los jóvenes se informen del daño que causan las personas en los ecosistemas costeros.
Mayra Figueroa, coordinadora de “Chile es Mar”, señaló que “para nosotros fue una experiencia inolvidable que los participantes de Generación Concausa nos visitaran. Muchos de ellos no conocían el mar y ser parte de este momento único para ellos, ver su asombro ante el inmenso océano de nuestra provincia, es impagable. Ahora tenemos más aliados de distintas partes de América para ayudarnos en el cuidado del mar”.
Tras su paso, los seleccionados se dirigieron a Santiago para presentar sus propuestas en la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), encuentro que contó con la participación de distintas autoridades, entre ellas la Presidenta Michelle Bachelet.
Generación Concausa es una actividad organizada por América Solidaria, CEPAL y UNICEF.